Las plagas bíblicas

En el Antiguo Testamento se habla de las diez plagas que Dios mandó a Egipto, por la negativa del Faraón de dejar partir al pueblo hebreo. Las diez plagas de Egipto o las plagas bíblicas, aparecen tanto en el Antiguo Testamento como en la Torá. Es en el Éxodo, el segundo libro del Pentateuco. Aarón y Moisés avisan repetidamente al Faraón del castigo de Dios. Si no dejaba salir al pueblo Hebreo castigaría a Egipto. Desde la antigüedad el hombre ha temido a las plagas. Tanto como para considerarlas castigo de los Dioses. Hoy vamos a hablar de las plagas bíblicas, de alguna forma precursoras de las plagas urbanas de hoy en día.

Empresa de Control de Plagas

I+D CONTROL, somos una empresa de control de plagas, con más de 25 años en el sector. Hasta la fecha no nos hemos tenido que enfrentar a ninguna plaga bíblica. Aunque hemos visto daños producidos por alguna plaga de proporciones bíblicas. Estamos registrados con el Nº 90-CM-S en el ROESB, Registro de Establecimientos y Servicios Biocidas. Al tiempo pertenecemos a ANECPLA, la asociación de las empresas de control de Plagas en España. Al margen de las bíblicas, ofrecemos nuestros servicios de control de plagas:

• en el control de plagas urbanas,
• en plagas de insectos de la madera,
• en plagas de fitosanitarios y desinsectación,
• y en tratamientos de prevención de la legionella,
• y mucho más…

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La historia

Según las escrituras los hermanos Aarón y Moisés fueron enviados al Faraón como mensajeros de Dios. Le pedían en su nombre que dejase partir al pueblo Hebreo en libertad. En aquella época eran esclavos en Egipto. El Faraón se negaba a dejar partir a sus esclavos. Cuentan las escrituras que para demostrar el poder de Dios, el callado de Aarón se convirtió en una serpiente. Los magos y brujos del Faraón, consiguieron convertir varas en serpientes. Lo que minimizaba el poder de Dios, de esa forma el Faraón volvió a negarse a dejar libre a los Hebreos. Se le conmino a aceptar bajo la amenaza de sufrir diez castigos en forma de plaga. Hasta que no sufrió Egipto las consecuencias de éstas, el Faraón no dejó partir al pueblo Hebreo.

Las diez plagas

Si algo tienen cada uno de estos diez castigos divinos, es variedad. Pero tienen en común con cualquier plaga actual, los daños económicos y el daño a la salud. Aunque existen diversas traducciones, los insectos son mayoría en los diez castigos sufridos por Egipto. La relación es la siguiente:

• aguas convertidas en sangre. Esto produjo la muerte de todos los peces del río Nilo. La pesca era una de las formas de ganarse la vida. Aparte de un olor nauseabundo que duró siete días.
• la invasión de ranas.
• la tercer plaga “Kinim”. Bien pudo ser de pulgas, mosquitos o piojos, o todos a la vez.
• la cuarta plaga de nuevo de insectos, las moscas. Pero unas moscas que atacaban al ganado y a las personas.
• la quinta, la peste que exterminó al ganado.
• la sexta, en forma de enfermedad cutánea.
• la séptima, la tormenta de granizo y fuego, que destruyó cultivos y huertos.
• la octava, una plaga de langostas que terminó por destruir los árboles y plantas que aún quedaban.
• la novena, las tinieblas sobre Egipto condenando al país a la oscuridad. Es este de todos los castigos el más relacionado con la divinidad, pues era una demostración de que el Dios Hebreo era más poderoso que el dios Ra, el Rey del sol.
• la décima, la muerte de los primogénitos. Podríamos considerar a esta última, como el símbolo de las enfermedades que conllevan las plagas.

Plagas, economía y salud

Los diez castigos divinos al pueblo Egipto son un paradigma de los efectos de una plaga en nuestra sociedad. Atacan a dos puntos claves de las sociedades modernas, la economía y la salud. Dependiendo de la naturaleza de la plaga en cuestión, lo primero afectado será la salud de las personas o la economía de la zona afectada. Pero de cualquier forma siempre hay daños económicos añadidos. Las inversiones necesarias para el control de la plaga, las medicinas y cuidados para solventar los problemas de salud. Toda plaga tiene un impacto económico en el área donde se localiza. Como vivimos en un mundo completamente globalizado, esos daños que antes eran muy locales hoy lo son globales. Plagas en cultivos en Asia, afectan al precio de productos que se manufacturan en Europa.