Picaduras de mosquitos, ¿por qué siempre a mí?

El verano ha llegado, lo cierto es que se adelantó y en plena primavera nos sorprendió. Con él llega un clásico, las picaduras de mosquitos. No hay noche que no oigamos su zumbido y perturbe nuestro sueño. Aunque casi es peor cuando no lo oímos y amanecemos con picaduras de mosquitos por todo el cuerpo. Da igual que estemos en la ciudad, o que hayamos bajado a la playa. No importa si seguimos trabando o estamos ya de vacaciones. Tampoco distinguen por edades, desde los más pequeños a los adultos de la casa. ¿Por qué aparecen de noche? ¿Dónde andan durante el resto del día? ¿Puedo hacer algo para evitar las picaduras de mosquitos? Hoy intentamos afrontar estas cuestiones y buscar alguna respuesta.

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Los mosquitos, insectos nocturnos…

Durante las horas de sol los mosquitos suelen estar escondidos. Los rayos del sol no es algo que los mosquitos disfruten. Por eso es habitual que la noche sea el momento que eligen para sus vuelos. A todo esto se une otro factor determinante en el comportamiento de los mosquitos. Los mosquitos no están dotados con una agudeza visual notable, más bien todo lo contrario. Para compensar ese déficit lo que sí tienen es un gran poder olfativo. Nos encuentran por las noches debido a nuestro olor corporal. Y por el dióxido de carbono que emitimos dormidos. Así que nuestras características físicas favorecen el ser la diana preferida de las picaduras de mosquitos. Por eso en ocasiones dos personas que comparten dormitorio tienen experiencias diametralmente opuestas en relación a los mosquitos.

Picaduras de mosquitos, las reacciones…

De entre los mosquitos quienes pican son las hembras, el motivo se encuentra en las proteínas contenidas en nuestra sangre. Algunas de éstas las precisan para desarrollar los huevos. En la acción de la picadura las hembras mosquito, segregan junto a la saliva una sustancia que es la que nos produce una reacción. La picadura acciona una respuesta local de nuestro sistema inmunitario. La respuesta del sistema inmunitario es segregar histamina. Dependiendo de cada persona la cantidad segregada varía, y eso influye en la aparición del edema alrededor de la picadura. En principio las picaduras de mosquitos en España no revisten una gran gravedad. En otros países las picaduras están relacionadas con epidemias y enfermedades graves. Aún así en nuestro país ya estamos alertados con el mosquito tigre, una especie invasora y potencial transmisor del Zika.

Hay trucos para que no nos piquen…

No existen formulas mágicas que consigan que este verano no tengamos picaduras de mosquitos. Sentimos tener que ser nosotros los que os abramos los ojos. Pero sí que es cierto que podemos ponerles trabas y lo mismo conseguimos no ser la diana predilecta de sus picaduras. Hay métodos casi históricos, como el uso de las mosquiteras. Podemos optar por ponerlas en los huecos de las fachadas para que no puedan entrar en casa, pero si dejar entrar el aire. También tenemos las que se disponen alrededor de las camas para dormir tranquilos. Este sistema es recomendado en países donde las picaduras de los mosquitos son causa de enfermedades graves. Por supuesto el tamaño de la trama es fundamental. Cuanto menos espacio se les deje para pasar mejor.

Los repelentes son otra de las posibilidades. En la actualidad tenemos los que se aplican en la piel, en distintos formatos y las pulseras. De cualquier forma deberíamos fijarnos a la hora de comprarlos en si son efectivos contra un alto número de especies de mosquitos. Que no tengan reacciones a su uso. Y recordar que sirven como su nombre indica para repeler al mosquito, en ningún caso para eliminarlo. Por lo que al pasar el tiempo de efecto volvemos a estar a su merced. Otra de las medidas preventivas más eficaces es evitar sus zonas naturales. Sobre todo en las horas de mayor actividad de los mosquitos. Y evitar zonas con aguas estancadas.