Brote letal de legionella, en Vila Franca de Xira
Un brote letal de legionella fue detectado en un hospital de Lisboa el pasado treinta y uno de octubre. Hay que recordar que el anterior brote letal de legionella en Portugal se detectó en el año dos mil catorce, sus cifras ya fueron preocupantes. Pero parece que este brote letal de legionella de dos mil diecisiete va a batir todos los récords negativos de su antecesor. El brote se ha localizado en el concejo de Vila Franca de Xira, en el distrito de Lisboa. De momento parece que este caso entrará en los anales como uno de los más mortíferos de la historia de esta bacteria, que se conoce desde 1976. La prevención y control de la legionella toma ante casos como estos de nuevo toda su importancia.
Resumen...
Brote letal de legionella más de trescientos hospitalizados
De momento con más de trescientos enfermos hospitalizados este parece ser el mayor brote letal de legionella. Aunque la aparición de legionella se asume mayoritaria en equipamientos sanitarios, lo cierto es que existen muchas otras instalaciones susceptibles de ser invadidas por la bacteria. Recordemos que el descubrimiento de la bacteria de la legionella data del año 1976 en un Hotel de Pensilvania en Estados Unidos. Una reunión de veteranos de la Legión Americana afectó a doscientos de ellos. De ahí el nombre que recibe.
El brote del que hablamos en Portugal ha empezado en unas torres de una empresa de fertilizantes. Antes de detectar el foco inicial, se pensó en otras torres de dos empresas cercanas al concejo de Vila Franca de Xira. En esta población se residen la mayoría de los infectados. Tras descartar esas dos primeras opciones, se constató el origen en esta fábrica. Es una fábrica que pertenece al grupo español Fertiberia.
El inicio de la infección
Una de las primeras teorías que se expandió como la pólvora fue que el foco era el servicio de aguas. El pánico se desato en el concejo de Vila Franca de Xira, el agua embotellada fue el objetivo de todos ellos subiendo masivamente la demanda. Del agua embotellada a las mascarillas que se agotaron al culpabilizar al aire de la infección. La OMS ha calificado el brote como de gran emergencia, poniendo a disposición de las autoridades lusas sus expertos. Éstas lo han desestimado. Recuerdan a la población que se puede beber agua del grifo sin problemas y que la infección no se transmite entre personas.
El ministro de Medio Ambiente portugués, Jorge Moreira da Silva, informó que desde el mes de octubre las torres de refrigeración de ADP Fertilizantes, empezaron a diseminar gotas contaminadas por la bacteria de la legionella. Coincide que al tiempo la climatología ha favorecido su expansión. Han sido días de mucho calor y humedad. El primer caso de infección se conoció oficialmente el dieciocho de octubre. El pasado diez de noviembre ya detectado el foco se procedió a clausurar las torres origen del foco. En el momento de escribir esta reseña había más de trescientas personas hospitalizadas. De ellas cuarenta en la UCI. Es de esperar que la tendencia de ingresos siga la senda de reducción de los últimos días.
La propagación de la legionella
Ha costado a los servicios lusos más tiempo de lo normal hallar el foco de la infección. Su excusa es la dispersión de los infectados, no todos viven en la misma localidad y hay casos de personas que salen de sus casas. A eso se le une algo habitual, los afectados, incluidos los fallecidos, por lo general tienen dolencias severas que complican el diagnóstico. Otra de las peculiaridades de este brote es la forma de propagarse, en esta ocasión por el exterior. Lo habitual es encontrar a los contagiados en un mismo recinto. Un hotel, en un hospital o en algún otro entorno cerrado. Este caso tiene la característica de haberse propagado por vía atmosférica. Los vientos han facilitado que se expanda a muchos kilómetros de distancia del foco.
Para el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC), este foco es sin duda el brote letal de legionella más grave en cuarenta años. Si nos fijamos en número de infectados nos encontramos con un caso en Reino Unido con más de cuatrocientos noventa infectados. En el año 2001 en Murcia casi llegamos a los cuatrocientos cincuenta afectados. En estas dos ocasiones los fallecidos se elevaron a siete. Con casi trescientos infectados en 2002 nos encontramos con un brote letal de legionella en Miyazaki, en Japón. También siete fueron los fallecidos en esa ocasión. La mayoría de los casos reportan muchos menos infectados, de hecho solo en ocho ocasiones se han superado la centena de infectados en todo el mundo.
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