Picaduras de insectos, qué hacer

El verano es la época del año en la que más picaduras de insectos sufrimos. Es lógico tenemos más tiempo libre para el ocio, y las temperaturas son favorables a los insectos. Pasamos más tiempo en contacto con la naturaleza y vamos provistos de menos ropa. El calor nos hace sudar y ese es un reclamo para muchas especies de insectos. Se dan todas las circunstancias para que las picaduras de insectos se tornen en un problema para todos nosotros. ¿Qué debemos hacer ante las picaduras de insectos? De ello vamos a hablar en las siguientes líneas.

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Síntomas de picaduras de insectos, leves

Lo primero de todo es confirmar que la mayoría de las picaduras o mordeduras de insectos son susceptibles de tratarse en nuestra propia casa. Salvo que seamos de ese grupo de personas que tienen a las picaduras una reacción alérgica grave. Esa reacción se conoce como anafilaxia. Es realmente importante saber cómo actuar ante estos casos, hoy os daremos algunas pautas de actuación. Por lo general hay una serie de síntomas de picaduras que no van a implicar una urgencia ante las mismas. Todo esto varia dependiendo del tipo de insecto y muy importante de la persona picada. Esos síntomas no urgentes son:

• un dolor localizado en la zona de la picadura,
• esa zona se enrojece,
• habrá picores e hinchazón alrededor de la picadura…

En ocasiones esa zona donde se encuentra la picadura, podrá tener sensación de ardor, entumecimiento e incluso algún tipo de hormigueo.

Síntomas de picaduras de insectos, graves

Como ya hemos dicho dependiendo del insecto y de la persona picada los síntomas pueden ser graves. En ese caso deberemos acudir a los servicios sanitarios de urgencias, o llamar a emergencias, el 112. Ante qué síntomas deberemos hacer esto, ante los siguientes:

• que la persona no pueda respirar. Tenga respiración entrecortada, silbe al hacerlo o tenga cualquier dificultad,
• que se le hinche la cara y la zona de la boca,
• que no pueda realizar la acción de tragar. Sienta opresión en la garganta,
• que se encuentre débil, o que su tono de piel se torne en color morado…

¿Qué podemos hacer?

Ante las picaduras de insectos hay una serie de actuaciones o medidas que podemos tomar. La primera sería la retirada del aguijón, comprobar que siga estando presente. E intentar quitar raspando con algún objeto de borde recto. Nunca usar pinzas pues corremos el riesgo de explotar el saco del veneno, aumentando las consecuencias de la picadura. La segunda es limpiar con abundante agua y jabón la zona de la picadura. Para bajar la hinchazón podemos aplicar hielo envuelto en un trapo en la zona de la picadura. Para hacerlo haremos tramos de diez minutos. Si se precisa o si sabemos que somos alérgicos a la picadura del insecto en cuestión se puede tomar un antihistamínico. Por prescripción médica es posible que se nos indique así como el uso de cremas específicas para la picazón. En los siguientes días debemos controlar las posibles señales de una infección.

¿Qué no deberíamos hacer jamás?

Una vez que hemos sufrido la picadura o mordedura de un insecto, lo que no debemos hacer jamás es administrar medicamentos sin prescripción médica. Administrar aspirina o estimulantes puede dañar la salud de la persona que ha sufrido la picadura. Tampoco podemos practicar torniquetes, en principio podría parecernos una idea peregrina, lo es, pero es sorprendente las cosas que llega a hacer el ser humano llevado por la más profunda de las ignorancias.

Si ya sabemos que algunas picaduras de insectos nos dan reacción, es decir somos alérgicos a ellas, lo mejor es ir preparado. Debemos informar a los que nos acompañan, identificar qué insectos son los que nos producen esa reacción y llevar la medicación que se nos receta. Que las personas que nos acompañan sepan exactamente lo que deben hacer.