Disfruta de tu piscina todo el verano, sin desperdiciar una gota agua

Se acerca el verano, cada vez parece más  pronto, y es hora de empezar a pensar en llenar tu piscina.

Tratamientos iniciales, trabajos previos después de pasar meses sin uso, van a ser necesarios seguro, pero, además, debes tener en cuentas los cuidados para no desperdiciar agua durante el verano.

En I+D Control de Agua, cuidamos el agua de tu piscina y realizamos todos los tratamientos necesarios para que esté en perfecto estado, pero hay unos puntos referentes al mantenimiento que debes conocer, que evitan perder esta agua que tanto escasea.

La importancia de ahorrar agua en tu piscina

Ahorrar agua siempre ha sido una necesidad, pero ahora ya es una obligación, contar con ella es un lujo que no podemos desperdiciar y que podemos conseguirlo para seguir disfrutando de nuestra piscina cada año.

5.-Consejos para ahorrar agua en tu piscina

Unos sencillos consejos, como éstos, evitan que tu piscina pierda agua, y también que necesites de reparaciones costosas a mitad de temporada.

01.-Coloca una lona de protección

Cuando no la vayas a usar en un tiempo, es muy adecuado que coloques una lona que la proteja.

Evitas que se llene de suciedad y de hojas, algo que en el momento de su uso te va a dar más trabajo, además, en según que casos, vas a necesitar de tratamientos desinfectantes que te evitas si las mantienes protegida.

Previenes la evaporación, que es una pérdida que puede llegar al 70% del volumen del vaso, una buena forma de no tener que estar añadiendo agua hasta si nivel, constantemente.

No solo se recomienda durante meses enteros, sino en franjas de tiempo amplias en las que no utilice tampoco.

Si tu piscina es comunitaria, muchas horas está vacía, también es bueno colocarla en esas horas que el horario no permite su utilización.

Otra ventaja es que, al contar una lona, los días en los que se prevean lluvias intensas, evitas que se ensucie el agua, afecte a su calidad y necesites de tratamientos que la mejoren que, en otro caso, no serían necesarios.

02.-Niveles químicos adecuados

No solo es necesario por la piel de los bañistas y por cumplir la normativa, que son dos temas muy importantes, y obligatorios, sino para conseguir un ahorro de agua.

Una piscina esté siempre limpia y que cumpla con los valores adecuados de pH, evita que la necesites vaciar por algún inconveniente grave, o que tengas que estar añadiendo agua para equilibrar una mala dosificación.

03.-No la llenes de más

No es necesario que desborde de la pileta, solo consigues derrochar agua que no beneficia, ni mejora para nada el baño.

Evitas un desperdicio enorme, mantenla a nivel que te aconseje la empresa de mantenimiento de la piscina, vas a conseguir que no se salga en la entrada y salida de bañista, además de un ahorro durante toda la temporada que vas a notar, sin duda.

04.-Mejor que esté llena todo el año

Incluso en invierno, aunque pueda parecer extraño, es una manera de ahorrar.

Tener que vaciarla cada año es un gasto de agua posterior enorme, basta con protegerla lo más posible, con la lona y luego tener un adecuado equipo de limpieza de agua.

05.-Evita fugas de agua

El primer paso en una buena decisión en el momento de diseño, y su construcción, con materiales adecuados y un equipo que la realice de manera responsable.

A partir de ahí, ya se trata de un seguimiento, y de estar pendiente de que no exista posibilidad de fuga de agua, ya sea por el propio vaso, o por alguna pieza de los equipos de funcionamiento.

Una empresa de mantenimiento puede comprobar que todo funcione como debe, y nada esté deteriorado con unas revisiones periódicas.

Tratamiento del agua de piscinas

Realizar un correcto tratamiento del agua de la piscina es esencial para no provocar problemas a las personas que se meten a nadar cada verano, además de que cumples con la normativa de tu Comunidad.

Es una forma de evitar sanciones y de asegurarte la tranquilidad para usarla todo el verano sin problema.

Contar con una empresa que se dedique a esa tarea te ayuda.

I+D Control cuenta con unos profesionales que te lo aseguran, con toma de muestras in situ y comprobaciones en laboratorio, para confirmar el buen estado del agua de tu piscina.

Además, y cada día, se deben limpiar los elementos superficiales de la piscina, antes, como algas o insectos, previamente al acceso de bañistas.

Ajuste del pH

El equilibrio del pH es esencial para poder utilizar el agua de la piscina.

Para su uso en piscinas, debe estar entre los valores de 7,2-7,4, niveles que garantizan su calidad

El agua es diferente en cada localidad, tiene distintos tratamientos y se deben conocer para poder determinar el que tu piscina necesita.

Hay que hacer un primer control, antes del llenado, que determina el pH inicial, es la manera de saber si necesitas productos para equilibrar, con un pH+ o pH-.

No obstante, es algo que se tiene que controlar a menudo, su continuo uso puede hacer que cambie y que debas nivelar para recuperar los valores óptimos.

Dosificación de cloro

El cloro es el elemento más usado, muy eficaz para la desinfección del agua de una piscina, y la eliminación de bacterias.

Para saber el nivel de desinfección, y, por tanto, de cloro que debes añadir, se utiliza el potencial Redox, con el que determinas la cantidad de cloro del agua para su uso y consumo.

Antes de su primer uso, como en el caso del pH, se debe hacer un tratamiento de cloro para garantizar la desinfección del agua y también prevenir la aparición de algas.

Una empresa profesional en el tratamiento de agua para tu piscina consigue que tengas la seguridad de que está bien en todo momento, y que no hay peligro de que la gente se sumerja.

Los tratamientos no se limitan al inicio de la temporada, sino que se necesita de un mantenimiento que es mucho mejor que lo realicen profesionales.

Son temas que pueden no solo evitarte una sanción económica, además ayudan a proteger la salud de las personas que se sumergen en ella.

Contacta con I+D Control, podemos hacer un estudio de los tratamientos que necesita tu piscina y aconsejarte la mejor manera de evitar un desperdicio de agua durante los meses de verano.